lunes, 17 de noviembre de 2008

SE HAN CARGADO A LOS PATITOS

Sobre el papel, Málaga se convertirá en un remanso de paz y calma cuando se aprueben las nuevas ordenanzas municipales. Según se dice, el paso por nuestras calles emulará un rápido tele-transporte a cualquier ciudad que merezca ese nombre, lugares donde el porcentaje de vecinos civilizados humilla al de quienes no merecen más compañía que la del propio estiércol que esparcen en cuanto aire los rodea. Todo tiene sus porqués de raíces sociales. Las graves carencias de educación que nuestras aceras manifiestan a cada baldosa y en cada esquina proceden del origen marginal de un buen número de nuestro censo. Nadie es culpable de su ignorancia, pero sí del gusto por la misma. Ese comportamiento bárbaro lo exhibe buena parte de nuestro vecindario por malacitano. Desde hace siglos arrastramos una nula conciencia de la calle como hogar colectivo y, además, los distintos consistorios nunca han tomado cartas en este asunto de que sean castigadas conductas incívicas. Una leyenda romana (creo) cuenta que el graznido de las ocas alertó de que los galos pretendían asaltar la ciudad. Aquellos guardias tenían mejor oído que el de los Policías Locales que custodian el Ayuntamiento, a unos cincuenta metros de donde actuaron quienes han matado a los patos del parque a golpes. Un síntoma más del abandono cívico en que esta ciudad se sume. Los gorrillas rodean impunes el edificio del consistorio y ante los ojos policiales exigen su impuesto. Todo este problema se resume en que nuestros concejales viajan en coches con cristales tintados y así la luz del sol nunca ilumina lo suficiente la desidia de las calles. Perros malagueños que defecan donde quieran, o se agrupan en la plaza de la Merced al socaire de presuntos amos antisistema que los usan como bombas fétidas, coches tuneados que emiten sus coros de retumbes a cualquier hora del día o de la noche, suciedad crónica y ruido que bate marcas. Un panorama tópico donde se combinan los efectos de la mala educación social en rima perpetua con una permisividad institucional que el paseante no sabe si se produce por un ánimo de no molestar al voto, o por la simple torpeza de sus responsables. La Policía Local debería recibir órdenes, pero no se cursan. Las órdenes son promovidas por la legislación, que no cuaja. Mientras, los patos del parque constatan la desgracia de que su destino los albergara entre nosotros, malacitanos de buena fé que carecemos del sentido mas primordial, el de la convivencia. Descansen en paz.


domingo, 9 de noviembre de 2008

QUEDAMOS EN "LA MALAGUETA" EN ABRIL

Hace poco hablaba de dulces de Navidad fuera de temporada, ahora creo que toca otra dedicatoria.

Esta afirmación, (vernos en la playa de La Malagueta en Abril) que en principio puede parecer disparatada, nada tiene que ver con el ,tan debatido y polémico, cambio climático. No es fruto de la información que me haya podido pasar un primo físico, ni tan siquiera proviene de un amigo millonario y ´agorero´. Es producto de la observación del tiempo y ambiente que nos rodea. Hay signos claros y evidentes que el tiempo navideño, es decir, invernal, se ha adelantado a Noviembre. La televisión ya proyecta películas con escenas navideñas, los comercios exponen y venden: dulces, cestas, juguetes, etc. En alguno he llegado a escuchar villancicos. Mi buzón, además de los catálogos de juguetes y otros productos propios de la Navidad, ha recogido correspondencia de algunas ONG que, apelando al ambiente navideño, solicitan un aguinaldo solidario propio de esta época. En las calles y comercios ya cuelgan los primeros adornos navideños, siendo El Corte Ingles el primero en esta frenética carrera y me han dicho que Antequera tampoco se queda demasiado atrás (según mis fidedignas fuentes). Todos estos signos son un evidente síntoma de que la Navidad se ha adelantado casi dos meses. Por tanto es de esperar que el verano también lo hará, siendo, aproximadamente, el mes de abril el primer mes de la canícula*. He de confesar que siempre envidié y admiré a los adelantados a su tiempo, por lo cual aprovecho la ocasión, ¡a primeros de noviembre!, para despedirme deseándoles de todo corazón: Una feliz Navidad y próspero año nuevo otra vez (Que asco).


*Canícula: Los días de las canículas (o de la canícula) son la temporada del año en que es más fuerte el calor, tanto en el hemisferio Sur como en el Norte.



LA NAVIDAD ES UNA MARCA AMIGUITOS, PERO EN FIN, NOS GUSTAN LAS MARCAS, Q LE VAMOS A HACER




domingo, 2 de noviembre de 2008

ADICTO

Cada día los titulares de los periódicos nos regalan alguna gran frase de alguien. Hace días he leído ésta de Jonathan Demme, director de ´El silencio de los corderos´: "ser humano es ser adicto". Un buen hilo para tejer. Hay adicción a meterse sustancias en el cuerpo (prohibidas o legales), adicción al sexo, a Internet, al juego, a la tecnología, al consumo, a la fama, a la política, al deporte, a la religión. En realidad quien no sea adicto a algo es sospechoso. De un adicto nos fiamos, sabemos dónde tiene concentrada su pasión mórbida, su manía, y podemos medirle a partir de ella. La adicción al final es una ingesta excesiva de algo para calmar la ansiedad, y, ¿qué es un ser humano sin ansiedad, sin un vacío interior? El motor de las personas y de la humanidad es ese vacío, nos movemos y hacemos cosas para tratar de llenarlo. La humanidad misma, como causa, es una adicción.